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jueves, 12 de septiembre de 2013

He won't go.

Seamos sinceros, al principio solo jugábamos, pero se nos acabó yendo tanto de las manos que ahora jugamos a jugar a que nunca jugamos. A mí me desgarraba el saber que vivía en un mundo aparte de tus deseos y a ti el querer más que la propia luna. Te corroe los huesos el no poder superarte para seguir cuesta arriba mientras que yo veo como te mojas cuando llueve. Tú y todos. En un constante 'ir más lejos' te he perdido la pista y no sabes como duele sentirte tan lejos.
Noto la música tan mía que no puedo evitar acordarme de todo lo que has dicho al son de estas notas, el cosquilleo de sentir que hablar contigo era todo un reto; pero en algún momento de la carrera me alejé de ti por no poder senguirte el ritmo y ahora solo espero que ganes y destroces todos los fantasmas que intentaron hacer que tropezaras. Vuelvo a estar incómoda si tengo algo que contarte y sé que no soy un estrella, no puedo acaparar tus pupilas en las noches de ron. Las letras bailan en mi lengua indecisas y nunca logro juntar la fuerza para unirlas y dejar que levanten vuelo. ¿Dónde aprendiste a crecer? Ahora no sé si quiero ser como tú o chocar contigo hasta hacer fricción y fuego. Me has marcado tanto que tus ideas han llegado a fascinarme, me he perdido y me he encontrado buscándote; soñé que gritaba y no me oías y todo se volvió negro. ¿Y ahora qué? Ahora las cosas han cambiado y sé que el azar no existe, que dios no juega a los dados.

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