Podemos hacerlo del modo seguro, o de la forma divertida, y tú puedes elegir.
Es un camino largo, y ya te aviso de que no es, ni mucho menos, recto. Es estrecho y sinuoso, lleno de baches, con los el clima en tu contra y muchas, muchas pruebas que superar. Muchas anécdotas escondidas. Y antes de empezar, te adelanto de que puedes ir en avión. No te guardaré rencor. Así te aseguras el éxito. Pero te puedo decir, que yo, por mi parte, seguiré la primera opción, pisando cada roca que me encuentre y apartando a todo aquel que se me cruce ;)
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